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21 de febrero de 2015

UNA ECUACIÓN PERVERSA: MAS TECNOLOGÍA = MENOS EMPLEO

Resultado de imagen de robotica industrialImparables parecen los avances tecnológicos, e imparable también el  incremento exponencial de la población mundial. En la actualidad, ésta asciende a 7.274 millones de individuos, con más de 200.000 nacimientos cada día; la ONU estima que a medidados de este siglo rebasará los 9.000 millones, y hacia el 2100, rondaría los 11.000 millones.

La tecnología provoca, inevitablemente, la amortización de numerosos puestos de trabajo no cualificados -y últimamente semicualificados-, lo que combinado con el mencionado ascenso de la población, provocará un incesante aumento del desempleo.

Resulta evidente que la tecnología ayuda a las empresas a ser más eficientes y a obtener mayores beneficios en su cuenta de resultados, pero su subproducto es una bolsa de desocupados cada vez mayor. La ecuación es simple: más tecnología = menos empleo

Y es que los nuevos puestos surgidos de aquella son muchos menos de los que se destruyen. Si se continua con el mismo modelo, la brecha seguirá haciéndose más y más grande, y las consecuencias sociales serán impredeciblemente negativas.

Para evitarlo, parece poco menos que imprescindible cambiar el paradigma político-económico vigente, lo que no será nada fácil, pues las élites ganadoras en los procesos de interés económico no van a pactar un nuevo contrato social si no tienen enfrente unos actores sociales lo suficientemente poderosos.

Recientes declaraciones de César Alierta, presidente de Telefónica, no dejan de ser un brindis al sol: "El país (se refiere a España) puede tener una tasa de paro del 8% en 2018" . Sin embargo, no especificó de que manera se podría lograr la creación de nada menos que 3,2 millones de empleo en sólo 3 años. Se espera con expectación que diga cómo.

16 de febrero de 2015

LA BOLA DE CRISTAL ELECTORAL DIJO NO

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Tomás Gómez
Según ha repetido Pedro Sánchez, el PSOE quiere una candidatura "ganadora" para Madrid, de lo que se deduce que Tomás Gómez era, sin duda, un candidato perdedor. A Gómez, no obstante, lo habían elegido en primarias los propios militantes, de lo que se deduce que han acabado siendo unos electores perdedores.

Menos mal que en Ferraz pueden detectar cabalmente quien va a ser ganador o perdedor. Se supone que deben poseer una bola de cristal electoral, que no sabemos si se la habrán enseñado al pobre Tomás, al que un conocido columnista de "El Pais" calificaba hoy (16-2-2015) de "tóxico y desabrido". Leña al mono del árbol caído.

De lo que infiere que la opinión de los militantes solo será válida -y esto no vale sólo para los socialistas- si aciertan a elegir un candidato que en las sapientísimas alturas se considere idóneo. Que me perdonen si casi digoque estos métodos  se parecen más a una democracia "orgánica" - recuerden los más viejunos- que a una democracia representativa. Porque, a lo que parece, lo único que importa es ganar, ganar como sea.


¿La democracia interna? ¿Las primarias? Hasta ahora palabras tabú para los aparatos de los partidos, de derechas o de izquierdas.

14 de febrero de 2015

EL DESTIERRO DE CARLOS E. CUE O EL VIRAJE POLÍTICO DE "EL PAIS"

Carlos E. Cué
Leemos en la prensa confidencial: 
La vicepresidenta del Gobierno sigue reestructurando a su gusto el diario El País, de su íntimo amigo Juan Luis Cebrián. Ya cambió al director y ahora, en pleno año electoral, parece que no le gusta el carácter incisivo del redactor de El País que se encarga de los temas relacionados con el Partido Popular, Carlos E. Cué. Según Vozpopuli, el Grupo Prisa, que mantiene unas relaciones excelentes con la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría, ha decidido sustituir a Cué, el preguntón del Consejo de Ministros, y buscar a otro periodista que no incomode al Gobierno en vísperas de unas elecciones decisivas.

Lejos, muy lejos, de aquella afirmación repetida hasta la saciedad por Juan Luis Cebrián tiempo atrás que decía que la prensa debía ser siempre un contrapoder.

(…) “Según ha confirmado Libertad Digital, el director de El País, Antonio Caño, y Juan Luis Cebrián han acordado enviar a Cué a Argentina como premio de consolación, aunque su partida no será inmediata, sino dentro de unos meses y en principio no por una larga temporada. Según estas fuentes, "ambas partes están contentas" con el acuerdo”. Esto último suena un poco raro; no parece que sea un acuerdo, sino una imposición. La parte que seguro estaría contenta es la de Cebrián, la otra no creemos que tanto.

Si esto es cierto, recuerda mucho a lo sucedido, hace muchos años (1982), en “El País”, cuando era director Juan Luis Cebrián. También envió a Argentina al que era subdirector, Martín Prieto.

Y sigue: es conocida la estrecha amistad que une a Cebrián con Sáenz de Santamaría. Al principio de la legislatura, con El País al borde de la ruina, la vicepresidenta logró que los bancos renegociaran su deuda y no echara el cierre. El consejero delegado de Prisa le ha agradecido el favor. Ni una mala palabra sobre la vicepresidenta se leerá en El País. De hecho, recientemente inició una campaña para que sustituya a Rajoy en la Presidencia del Gobierno. La última vez que se les vio juntos fue durante la inauguración de El País en catalán brindando por el éxito de la publicación.”

¡Ay, El País! Quien te ha visto y quien te ve.

1 de febrero de 2015

"EL PAÍS" CONTRA MONEDERO

Penoso resulta ver como el diario "El País" (28 de enero) violenta la objetividad periodística en el "caso Monedero", si se me permite la expresión. En el rotativo del grupo Prisa leemos el siguiente titular : "Monedero falseó el currículo sobre sus cursos en Alemania y México".

Ya en el primer párrafo del cuerpo de la información corrige "falseó" y lo sustituye por "exageró", siendo innecesario subrayar que no son formas verbales sinónimas. El dirigente de Podemos   señala en su CV que fue "profesor invitado en el Instituto de Estudios Políticos de la Universidad de Humboldt de Berlín (dirigido por el profesor Claus Offe)", y "El País" se echa las manos a la cabeza cuando resalta que Offe no dirigió tal Institución, sino que fue profesor, y también cuando el alemán comenta que el español no fue exactamente un profesor invitado, sino que, posiblemente, haya sido invitado a dar alguna conferencia. Después Offe confesaría que, en la actualidad, su memoria no es la mejor.

El subtítulo de la pieza también parece tendencioso, y dice así: "El politólogo alemán, al que cita como referencia universitaria, no le recuerda". No obstante, en un ladillo, "El País" pone en boca de Offe la frase "puede que haya dado alguna conferencia como mucho", siendo estas dos últimas palabras un invento añadido por el editor de la información, que suma por su cuenta una connotación  negativa a la frase. Nuevamente, se explicita el sesgo contra Monedero amplificando mínimos matices o inventándose palabras no pronunciadas, una técnica que no aplica cuando se refiere a otros políticos, sobre todo si son del PSOE.  Y es que hay una diferencia sideral entre adornar un currículo (el que esté libre de culpa....) y robar millones de euros al erario público. ¿Qué tiene "El País" contra Podemos, que tanto le ataca?


Al día siguiente, para más inri, la Universidad Iberoamericana de Puebla  desmintió las afirmaciones publicadas por “El País” también aquel día, en las que se decía que Monedero  no había sido profesor invitado, entre otras universidades, del centro de estudios mexicano. En una carta, la directora de comunicación institucional de la universidad confirmó, sin ambages, que Juan Carlos Monedero participó como profesor invitado durante “cinco veranos” (2005-2010). 


En dicha misiva, se aclara que el politólogo no aparece en la nómina de la institución, ya que él no forma parte de la plantilla docente. Se trata así de un desmentido que ya trató de realizar el mismo profesor a través de Twitter, donde colgó una fotografía donde se podía observar un libro editado por la universidad en el que se aseguraba que efectivamente sí que había sido profesor invitado.