Más ligero que un agujero negro, pero más pesado que una estrella de neutrones. Así es el misterioso objeto que se ha fusionado con una de estas estrellas, según la onda gravitacional registrada por los detectores de la colaboración LIGO-Virgo-KAGRA, en la que participa la Universidad de las Islas Baleares. El anuncio coincide con la reanudación de las operaciones de detección de este equipo internacional.
El grupo GRAVITY de dicha Universidad
ha participado en la detección de la señal de onda gravitacional GW230529,
realizada por los detectores de la colaboración LIGO-Virgo-KAGRA el 29 de mayo
de 2023. El detector LIGO está en Estados Unidos, Virgo en Italia y el
interferómetro KAGRA en Japón.
La detección tuvo lugar durante
la primera parte del cuarto período de observación (04a) de los detectores, del
24 de mayo de 2023 al 16 de enero de 2024. Después de una pausa de varios
meses, este miércoles se ha reanudado la segunda parte (O4b), que se prolongará
hasta febrero de 2025. La onda gravitacional GW230529 fue causada por la fusión
de una estrella de neutrones y un objeto compacto con entre 2,5 y 4,5 masas
solares
Según los investigadores, la onda
gravitacional GW230529 habría sido causada por la fusión de una estrella de
neutrones de entre 1,2 y 2 masas solares y un objeto compacto desconocido con entre 2,5 y 4,5 masas solares,
mayor a la esperada para ser una estrella de neutrones y menor que un agujero
negro. El texto provisional del estudio ya se ha publicado.
La masa de este objeto
desconocido desafía los modelos actuales de poblaciones de agujeros negros y
estrellas de neutrones, que proponían la existencia de una brecha en la
distribución de objetos compactos, según la cual no podrían existir objetos en
el intervalo entre 3 y 5 masas solares.
Hasta ahora, las estrellas de
neutrones detectadas tienen menos de 3 masas solares, mientras que los agujeros
negros tendrían más de 5.
Fuente:
SINC abril2024