EL DECÁLOGO DE LAS DIEZ ESTRATEGIAS DE MANIPULACIÓN MEDÍATICA NO FUE ESCRITO POR CHOMSKY

Noam Chomsky es un notorio lingüista norteamericano (Filadelfia, 1928),  fundador de los

estudios de gramática generativa y transformacional. Profesor en el prestigioso Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) sus principales obras son “Estructuras sintácticas” (1957), “Aspectos de la teoría de la sintaxis” (1965), “Lingüística cartesiana” (1966), “Sintáctica y semántica en la gramática generativa” (1972) y “Gramática generativa” (1988).

Más conocido sería, sin embargo, por su compromiso político en la crítica del neoliberalismo, en particular, y del sistema económico capitalista, en general. 

Se le atribuye incorrectamente, en numerosas páginas de Internet, el decálogo conocido como las “Las 10 Estrategias de Manipulación Mediáticas” que, según fuentes solventes, habrían sido escritas en francés, el año 2002, por Sylvain Timsit, un personaje del ámbito de la izquierda del que no sabe demasiado, excepto su labor en la Red,  que estudió en la Université Paris Dauhine (1979-82) y que se autodefine como un “Independent Online Media Proffesional” (puede consultarse su web http://www.syti.net/Manipulations.html)

En todo caso, el decálogo resulta de interés, sobre todo si lo contrastamos con la realidad actual de dichos Medios, en particular los audiovisuales y en los puntos que selecciono:

           

1.-“Elemento esencial del control social es la estrategia de la distracción,  desviar la atención pública de los problemas y los cambios importantes decididos por las elites políticas y económicas, a través de una lluvia continua de distracciones y de informaciones insignificantes. Esta estrategia es igualmente indispensable para ocultar al público los conocimientos esenciales en los ámbitos de la ciencia, la economía, la psicología, la neurobiología y la cibernética. Se trata de distraer la atención pública de los verdaderos problemas sociales, cautivada por asuntos sin importancia real, y mantener al público ocupado, muy ocupado, sin tiempo para pensar, de vuelta a la granja con los otros animales". Esto me parece bastante evidente en la transformación de los informativos de televisión, que cada vez más incluyen “noticias” banales (como, por ejemplo, desfiles de moda, “noticias del corazón”, Bodas reales y asimiladas, pseudonoticias  de pseudosalud, etc. )   

3.- “La estrategia de degradado. Para aceptar una medida inaceptable, basta con aplicarla gradualmente, "degradándola" en un período de unos 10 años. Es de esta manera que se impusieron radicalmente las nuevas condiciones socio-económicas durante los años 1980 y 90. El desempleo masivo, la precariedad, la flexibilidad, la subcontratación, los salarios menguantes, el recorte asistencial ... son tantos los cambios experimentados que habrían provocado una revolución si hubiesen sido aplicadas de forma abrupta”. Sin comentarios. Claro como el agua.

 4.- “La estrategia del diferido. Otra manera de hacer aceptable una decisión impopular es la de presentarla como "dolorosa pero necesaria", tratando de conseguir la comprensión y el  consentimiento de la Opinión Pública. Y es que  siempre resulta más fácil aceptar un sacrificio futuro que un sacrificio inmediato. Y mucha gente, por otra parte, tiene una tendencia a esperar ingenuamente que “todo irá mejor mañana" y que, a la postre, se evitará el sacrificio anunciado. Asimismo, se da tiempo para que el público se acostumbre a la idea del cambio y de aceptarle con resignación cuando llegue el momento. Ejemplo reciente es la introducción del euro y la pérdida de soberanía monetaria y económica, que fueron aceptados por los países europeos en 1994-1995 para su implementación en 2001.”  Aspectos, en efecto, visibles en la actualidad de la gestión de la comunicación de la crisis económica por parte del gobierno del partido Popular, insistiendo en la absoluta necesidad de los recortes (sin admitir alternativas a los mismos) como, único camino para lograr salir de la crisis.

5.- “Dirigiéndose al público como a los niños, utilizando un discurso, argumentos, personajes, y un tono particularmente infantilizado, como si el espectador fuese un niño de corta edad o discapacitado mentalmente. Esto produce una especie de sugestionabilidad que comporta,  con bastante probabilidad, una reacción de acrítica como la de un niño”. En particular, no poca de la publicidad televisiva se basa en esos criterios, y los informativos de televisión son ya tan epidérmicos que hasta omiten datos esenciales de la información.

 7.- "La calidad de la educación dada a las clases inferiores debe ser de la clase más pobre, por lo que la brecha de la ignorancia que separa a las clases inferiores de las clases superiores sea y siga siendo incomprensible para las clases bajas." ( Sylvain Timsit  © syti.net 2002). La traducción de los textos entrecomillados de Timist es mía.