¿PACIENCIA?

El presidente Rajoy ha pedido paciencia.

Pero hay mucha gente en España que la ha perdido, porque su prestación o subsidio de desempleo se le ha agotado. 

O porque ve inminente el cierre de la empresa donde trabaja.

O porque es autónomo o pequeño empresario y el banco no le da más crédito y tiene que cerrar.

Al presidente Rajoy le preocupa la prima de riesgo, pero está contento porque ha bajado.

Al parado le preocupa como va a pagar las facturas del mes que viene.

Son preocupaciones diferentes, porque son intereses diferentes.

A Rajoy le preocupa la prima de riesgo porque el Estado y las grandes empresas se financian en base a ese indicador. Quiere cuadrar las cuentas, le pese a quien le pese. 

Al parado le importa poquísimo dicha prima, porque sabe que, aunque baje, no va a encontrar trabajo el mes que viene, y el Estado no va a prorrogarle ayuda alguna. 

Al Presidente Rajoy le preocupa que su partido vuelva a ganar las elecciones allí donde se presente.

A la gente corriente le preocupa llegar a fin de mes.

Los ajustes y recortes afectan a las clases medias y populares, mientras que las grandes empresas españolas siguen generado cuantiosos beneficios, pues gracias a la multitud de bonificaciones establecidas  logran reducir el tipo efectivo del Impuesto de Sociedades en torno al 10%, según los cálculos de los inspectores de Hacienda.

A lo anterior los economistas lo llaman "crisis fiscal". Otros lo llamamos "no pagan lo que tienen que pagar los que más tienen".

El notario en excedencia y Presidente del Gobierno, don Mariano Rajoy Brey puede permitirse el lujo de tener paciencia.

Aquellos a los que desahuciaron de su casa, no.

La prima de riesgo baja, los parados suben. Eso se llama macroeconomía.