Sabemos que, cada día, nacen más seres humanos que los que
fallecen; esto provoca que la población mundial crezca sin parar. A su vez, es
de suponer que los nuevos habitantes quieran tener un trabajo con el que
ganarse la vida; por lo tanto, la población activa se incrementará sin pausa
(factor A)
Asimismo, y gracias, en parte, a las matemáticas, sabemos que
la mecanización e informatización de los procesos económicos ha reducido
considerablemente la necesidad de mano de obra, una circunstancia que, con toda
probabilidad, irá creciendo en el futuro. (factor B).
Si sumamos A+B el resultado no puede ser otro que: desempleo
crónico y en aumento. Esto es lo que ofrecen las diversas economías mundiales
de hoy, en particular el modelo neoliberal capitalista.
Según la OIT el desempleo en el mundo alcanzaba, en 2014, los
202 millones de personas (197 en 2012). La verdad es que parecen pocos, dado
que las cifras las ofrecen, en muchos casos, son de países que no tienen ningún
interés en dar los reales, por ser muy altos. Por ejemplo, en India el paro
sería solo el 3,6%, con una población activa de 488 millones de individuos.
Esto nos da un desempleo de solamente 17,5 millones de personas.
Y hay que añadir que, según dicha organización, el número de trabajadores con “empleos
vulnerables” estaría en torno a los 1.440 millones. Y de salarios mejor no
hablar.
Por otra parte, en la actualidad, el 1% de la población
mundial, aquellos que tienen un patrimonio valorado de 760.000 dólares (667.000
euros o más), poseen tanto dinero líquido o invertido como el 99% restante de
la población mundial. Los datos no son sospechosos: es un estudio del banco de inversión
Credit Suisse.
Las matemáticas no engañan: o se distribuye de algún modo la
riqueza y el trabajo o las consecuencias serán muy negativas. Para todos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario